La deshidratación está relacionada con el deterioro de la función barrera de la piel. Las causas: los cambios hormonales, el frío, el viento, el tabaco, etc. Para no dañar la película protectora de la piel, es importante una higiene suave: utilizar productos limpiadores sin jabón y evitar el agua caliente y los roces demasiado fuertes. Aplica una crema hidratante adaptada a tu tipo de piel todas las mañanas, una mascarilla hidratante para dormir para reforzar la hidratación por la noche y un sérum hidratante en cada cambio de estación

La base de la rutina será la misma durante todo el año: limpieza suave por la mañana y por la noche, seguida de una pulverización del Agua termal; una crema hidratante o BB cream por la mañana; y un tratamiento hidratante, antiimperfecciones o antiedad por la noche. Además, una o dos veces a la semana, utiliza un exfoliante suave y una mascarilla hidratante.
Adapta tu rutina a los cambios de estación: añade un sérum hidratante y sustituye tu crema de día por una hidratante con SPF30 cuando haga buen tiempo.

Recomendamos un producto para el cuidado del rostro como el Aqua-Gel, que puede utilizarse como hidratante de día y de noche, como crema para el contorno de ojos y como mascarilla. Y no olvides una loción micelar, un spray de agua termal y una BB cream para tener una piel bonita mientras te proteges del sol.